viernes, 15 de febrero de 2013

Frente a Frente

Durante el trayecto que se hallaba entre la casa habitada por los mosqueteros y el establo no era grande la distancia, se podía ver a simple vista que estaban separadas por unos ocho o diez metros.
Phillippe y D'artagnan caminaban en un rotundo silencio que los abrazaba en la oscura noche, parecía como si ninguno de los dos tuviese algo para decirle al otro  pero la realidad era que ambos hombres tenían mucha curiosidad de saber sobre el otro. El gascón se encontraba ahogado entre tantas palabras y pensamientos que no sabía cómo abordar la situación mientras que Phillippe, no sabía cómo actuar frente al capitán, Porthos le había contado una gran hazaña del mosquetero, aquel hombre cuidaba a su hermano tal como lo haría un padre, era su sombra además pero también parecía que era un gran amigo de los hombres que lo habían librado. Llevaba dos días de su libertad y el nombre de D’artagnan ya lo había escuchado un millón de veces.

¿Era leal al rey o era leal a sus amigos? Aquella era la gran cuestión del joven rey. ¿Qué debía de pensar?

Y la verdad para Phillippe era que tan solo unos instantes atrás el nombre de D'artagnan representaba peligro, ya que para el plan de Aramis el mosquetero era el gran obstáculo para saltar. Pero ahora teniéndolo a su lado, mirándolo en silencio aquel temple tan sereno no le causaba temor sino respeto y no encontraba las palabras para poder romper aquel silencio que se iba tornando cada más incómodo para ambos.

martes, 12 de febrero de 2013

Una pequeña conversación

Una pequeña conversación

D'artagnan al salir de la habitación en donde momentos atrás había estado con sus amigos sintió como su cabeza comenzaba a dar vueltas pero que a su vez su corazón y el peso que sentía en su espalda ya no era tan grande como antes. El mosquetero dio unos pasos cuando se encontró a Phillipe mirándolo fijamente. Una sonrisa torcida cruzo por el rostro del muchacho.

- He escuchado que usted venía por mi señor - dijo el joven cerrando la puerta de la habitación contigua a la que se hallaban los mosqueteros - Se que es de mala educación escuchar pero tenía mucha curiosidad por saber de quien se trataba.

- Me imagino que mi llegada era inesperada para todos y por eso el revuelo.

- Se ve que usted es una persona importante , señor.

D'artagnan miró a Phillipe con una sonrisa y movió la cabeza sin decirle nada. Tenía muchas emociones en aquel momento y el vértigo se apoderaba poco a poco del mosquetero. Así que antes de comenzar a tambalear por aquel lugar el capitán camino nuevamente hacia la puerta de la habitación en donde lo estaban esperando y Phillipe en silencio entró detrás de él. El mosquetero cerro la puerta detrás de él con toda la tranquilidad del mundo y luego se acomodo a un costado sin saber que era lo que debía hacer.

- Phillipe quiero presentarte a quien será tu capitán de mosqueteros y guardia personal en el palacio real . Él es el señor D'artagnan , una de las mejores espadas de toda Europa - Aramis se acerco a Phillipe y luego miró a su amigo - el señor aquí presente es vuestro amigo como es de todos nosotros.

Phillipe estiro la mano para saludar a D'artagnan y el gascón tomo la mano de Phillipe para darle un fuerte apretón de manos pero con cuidado y mucho respeto. El mosquetero sabía que debía comportarse, que Phillipe sería Luis y debía tratarlo como lo haría con Luis porque al fin y al cabo él sería su capitán.

- Es un gusto para mi caballero D'artagnan el conoceros , he escuchado mucho sobre vosotros.

- El gusto es todo mio Phillipe - el mosquetero sonrió de costado y miró al mozalbete a los ojos - Realmente espero su majestad que haya escuchado cosas buenas sobre mi.