martes, 9 de diciembre de 2014

Capitulo XIV : Eternas horas

D'artagnan abrió los ojos producto de un trueno que lo había despertado, ya no era de noche sino de día, aunque un día muy gris seguramente Aramis no iba a estar feliz por el clima.

El mosquetero se tomó su tiempo para despertarse o aquello intentaba cuando otro trueno lo interrumpió haciendo que se sobre saltara, no solo a él sino que Ana de Austria quien aún dormida se aferró a la camisa de su amante con un poco de fuerza.

- ...- el gascón la admiro mientras pasaba su mano por aquellos cabellos oscuros.

domingo, 21 de septiembre de 2014

Capitulo XIII: Misterio sobre una vida.

La cena comenzó en silencio, todos se miraban unos a otros pero ninguno se atrevía a romper aquel silencio. Cada uno de ellos en el rincón más oscuro de su corazón tenía algún tipo de secreto.
Porthos siempre tan jovial y risueño estaba preocupado, todo llegaba alguna vez en la existencia de un hombre como el gran obelix. Por primera vez sentía miedo, le gustaba su vida tal como era pero eso no quitaba que extrañaba también la aventura, las luchas y por sobre todo a los amigos.
Ahora que estaba sobrio, podía apreciar que toda aquella tranquilidad tendía de un fino hilo, que todo podía cambiar de la noche a la mañana y si eso pasaba, si todo salía bien iba a vivir mucho mejor de lo que hubiese pensando que iba a vivir en su vejez pero ¿Y si todo salía mal? Si el plan de su mejor amigo no funcionaba, por lo menos podía pensar en que iba a morir alrededor de los hermanos que la vida le había dado.

- ¿De qué te sonríes? – Harbley le pregunto en tono inaudible a Du-Vallon mientras lo codeaba por debajo de la mesa.

- De que eres un buen ingeniero - el señor Du-Vallon solo le contesto eso a su amigo sin borrar aquella sonrisa de felicidad del rosto antes de darle una gran mordida a una pata de pollo.